Destacan
oportunidad de crecimiento económico y social de la región
Marcelo Puelles,
enviado especial
Asunción, oct. 28
(ANDINA). La XXI Cumbre Iberoamericana se inició esta noche en Asunción con un
llamado del secretario general de esa comunidad, Enrique Iglesias, para
alcanzar consensos políticos a fin de concretar las reformas estructurales que
necesita la región.
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Presidente de la República, Ollanta Humala,
participó en
inauguración de XXI Cumbre
Iberoamericana.
Foto: ANDINA/Prensa Presidencia.
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Durante la inauguración
de la cita, Iglesias dijo que el mundo vive uno de los momentos más turbulentos
de las últimas décadas, mientras que Latinoamérica crece a altas tasas, pero
necesita reformas profundas para transformar esa expansión en desarrollo.
"Para que esto
pueda marchar se precisa más que nunca que los partidos políticos tengan la
capacidad de instrumentar grandes consensos políticos frente a puntos en que
todos deberíamos de alguna manera estar de acuerdo", señaló.
Aseveró que el
crecimiento de casi 5.0 por ciento anual que ha logrado Latinoamérica en el
último quinquenio "no es gratis; la región debe acometer con determinación
las reformas que le permitan enfrentar sus desequilibrios sociales".
Ante la presencia de
los jefes de Estado y cancilleres de los 24 países miembros de la región,
Iglesias afirmó que América Latina ha tenido un buen desempeño económico ante
la crisis internacional, y puede aspirar en la presente década a un crecimiento
sostenido.
Lamentó, empero, que
los países desarrollados que ahora enfrentan problemas financieros no hayan
“mirado las experiencias de América Latina” durante la década de los 90s y del
comienzo del presente siglo, para sacar lecciones.
“Los países emergentes
dieron señales de dinamismo y sentido común, que les permitió capear lo peor
del temporal, manteniendo tasas estables de crecimiento, empleo, inflación y
drástica reducción del endeudamiento público”, dijo.
Señaló que los países
de América Latina han registrado un crecimiento de 5% en promedio en el último
quinquenio, con bajo desempleo, baja inflación, reducción de la deuda externa,
extraordinaria acumulación de reservas, y 50 millones de personas dejaron la
pobreza.
El crecimiento de la
región ha sido el resultado de dos grandes factores, por una parte, una sólida
conducción de las políticas macroeconómicas, y por otro lado, el buen
comportamiento de mercados de materias primas, estimulado por la demanda
asiática, apuntó.
También destacó que la
región cuenta con las fuentes energéticas, alimentos y minerales en abundancia
que Asia necesita.
“Sí, yo creo que es
posible aspirar a una década de sostenido crecimiento y avance tanto económico
como social”, subrayó.
En ese sentido, señaló
que para ello se requiere la recuperación de los mercados internacionales y que
la región “acometa con determinación” las reformas que le permitan enfrentar su
déficit económico y social.
“Este es el momento de
la acción y no de la autocomplacencia”, enfatizó Iglesias.
Iglesias, ex presidente
del Banco Interamericano de Desarrollo (BID), exhortó a los gobiernos cuidar el
aspecto macroeconómico con la inflación, el endeudamiento y el balance en
cuenta corriente.
Asimismo, señaló que la
región debe invertir más en educación de calidad, de lo contrario “será
imposible construir un progreso en futuro en dinámica social”, porque sobre la
base de una exportación de materias primas no se construye un país con justicia
social.
También indicó que se
debe resolver el tema de la equidad social, impulsar la innovación para ganar
productividad económica y de gestión social, con la modernización de las instituciones públicas.
“Para que esto pueda
marchar se precisa más que nunca que los partidos políticos tengan la capacidad
de instrumentar grandes consensos políticos”, dijo.
Señaló que la
modernización del Estado es un imperativo sobre el cual debe haber un consenso
político, porque no se trata tanto de la dimensión del Estado, sino de su
eficiencia.
“Se trata de aprovechar asimismo con una
burocracia eficiente en base al principio del mérito y la capacidad, no habrá
un Estado eficiente con una burocracia ineficiente”, afirmó.
El presidente de
Paraguay, Fernando Lugo, anfitrión de la reunión, señaló a su vez la necesidad
de una alianza estratégica del Estado con la sociedad y el mercado.
"Hablo de un
Estado en el que las inversiones y el flujo de capitales se encuadren en las
políticas de desarrollo definidas por los poderes públicos", subrayó.
El mandatario
paraguayo, criticó los modelos de crecimiento en América Latina que han sido
“importados” y opinó que se encuentran más que agotados, ya que han conducido a
profundas crisis sociales.
Refirió que en la
mayoría de los casos, la aplicación de estos modelos “impuestos o importados”
han sido negativos como la fuga de capitales, la pérdida de riquezas naturales,
y el resultado de una clase social con privilegios y de una “gran masa” de
desheredados.
Asimismo, el presidente
Lugo exhortó a la recuperación de la soberanía económica de la región, y afirmó
que los recursos naturales estratégicos se constituyen en instrumentos de
inclusión social y combate a la desigualdad. (FIN) MDV